Este pasado miércoles por la tarde noche, los socios de nuestro coto ”La Dehesa”, nos reunimos en un bar de Huelva para intercambiar puntos de vistas sobre la marcha de la temporada cinegética en lo que se refiere a la climatología adversa que venimos padeciendo últimamente y su repercusión en la caza del coto. Y, como no sólo de pan vive el hombre, aprovechamos la ocasión para tomar unas copas.
Como todos estimamos que la situación actual no es la que debería, decidimos seguir sin cazar hasta que llueva y el campo tome otro aspecto.
Si se cumplen las previsiones meteorológicas y llueve en el próximo fin de semana y a principios de la siguiente, daremos la primera cacería de la veda general el sábado veintinueve del corriente. Si no es así, esperaremos a que el campo tome otro rumbo. Cazar nunca puede ser cazar por cazar, valga la redundancia. Entiendo la actividad cinegética como una afición que, para llevarla a cabo, hacen falta una serie de condicionantes y, entre ellos, la climatología, debe ser la adecuada. Si no es así, lo lógico es quedarse en casita. O mejor dicho, ir al campo, pero a dar un paseo y vigilar. La escopeta sí debe estar en la funda.
En la imagen, de izquierda a derecha estábamos Juan Luis, el que suscribe, mi socio Rafa, Paco, Juan y Manolo. Faltaron, por distintas razones, Gabriel y Tomás.
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