miércoles, 14 de marzo de 2012

FÉLIX RODRÍGUEZ DE LA FUENTE: XXXII ANIVERSARIO DE SU MUERTE.




            En el día de hoy, se cumple la friolera cantidad de treinta y dos años de la trágica desaparición de este gran personaje español. Naturalista y amante de los animales por excelencia, Félix Samuel Rodríguez de la Fuente, nace en Poza de la Sal –Burgos- el 14 de marzo de 1928 y muere en Alaska el 14 de marzo de 1980, cuando contaba, justamente, cincuenta y dos años.
            Los primeros años de su vida, con España envuelta en cientos de problemas políticos y la Guerra Civil después, es educado por su padre Samuel Rodríguez -notario de profesión-, por lo que al no tener que salir de su localidad para estudiar, sus visitas al campo y el contacto con la naturaleza fue casi a diario, lo que le hace que, desde un primer momento, sentiera una inmensa pasión por todo lo que rodeaba a la Naturaleza
                Luego, estudia Medicina en Valladolid, destacando en las pruebas orales por su facilidad para la oratoria. En 1952 participa en la fundación de la Sociedad Española de Ornitología. En 1957 se gradúa en Estomatología en Madrid y ejerce dos años como odontólogo, pero, al fallecer su padre, en 1960, abandona la medicina y se dedica a la caza con halcones y otras rapaces. De hecho, al poco tiempo publica su primera obra “El arte de la Cetrería”, incluso llega a trabajar como consejero de esta modalidad cinégetica en la grabación de la película “El Cid”.
            En 1962, el gobierno español le encarga la captura de una pareja de halcones peregrinos para un regalo al rey Saud de Arabia Saudita. Con posterioridad,  interviene en un programa de televisión “Félix, el amigo de los animales”. Escribió artículos sobre naturaleza en la revista “Banco y Negro” y dirige la película “Alas y garras” en 1966.
            Entre 1970/74 realiza la primera de sus grandes series televisivas “Planeta azul” y, poco después, la más conocida: “El hombre y la Tierra”. Esta serie con tres partes y una inconclusa, llega todas los hogares de los españoles, destacando los capítulos dedicados al lobo ibérico. Pero, filmando la cuarta parte en Alaska, la avioneta en donde debía viajar aquel día, perdía un poco de aceite y decidió a cambiar a una segunda. Todo el equipo volaba casi juntos en ambos aparatos, pero la suya, a consecuencia de un fallo en uno de los hidropatines, se estrelló contra el suelo. Mueren con él Dolson, el piloto, y el cámara de TVE Teodoro Roa (12,30 hora local, siendo en España las 23,30 del día 14 de marzo de 1980). Por último, decir que sus celebres “Cuadernos de campo” hicieron las delicias de los jóvenes y menos jóvenes amantes de la naturaleza, entre los que me encontré y me encuentro.
            Aparte de su fama como naturalista, la polémica sobre él se basó en las grabaciones que tuvo que hacer captando diferentes momentos de las muertes de distintos animales a manos de sus predadores, especialmente, de una cabra a manos del un águila real. Además, se le acusaba de utilizar animales adiestrados en cautividad –lobos y otros- para sus cortometrajes. Por último, decir que, parece ser que, era demasiado exigente con sus colaboradores y con todo aquel que trabaja a sus órdenes. Problemas todos ellos de poca monta si lo comparamos con el valor didáctico y formativo de los materiales que puso en nuestra manos.
            Por último decir que, el Dr. Félix Rodríguez, más que un científico muy formado y especializado, fue un personaje muy influente, naturalista y divulgador de diferentes capítulos sobre infinidad de especies animales, quizás un adelantado de su época. Su gran labor, no acabada por su pronta y desgraciada muerte, caló hondo y, todavía, a más de treinta años de su desaparición, sigue calando. De hecho, muchas familias españolas y la mía no era una excepción, esperábamos con gran ansiedad el día en que nuestra televisión proyectaba sus maravillosos capitulos. Aquella pegadiza e impactante voz, todavía "revolotea" en el interior de miles y miles de españoles amantes de la naturaleza y los animales.

              Estas instantáneas nos muestran un ejemplar de los cuadernos de campo sobre el lobo, la colección completa de la Fauna Ibérica y la de tres de sus vídeos: el jabalí, el lobo y el águila real.





               Valga esta cita de él mismo como epílogo al artículo:

             "Es preciso que a través de los poderosos medios con que cuenta la sociedad moderna, como la televisión, las grandes revistas y periódicos, las enciclopedias zoológicas y los libros de ciencia o divulgación, hagamos una llamada desesperada y permanente. Respetar nuestro entorno a nivel individual; necesitamos cuidar la tierra porque se nos está muriendo. Cada planta, cada animal, incluso cada complejo minero, cada paisaje, tiene su razón de ser. No están a nuestro alcance por puro azar o capricho, sino que forma parte de nosotros mismos. El hombre no es un ovni venido de una lejana galaxia; el hombre es un poema tejido con la niebla del amanecer, con el color de las flores, con el canto de los pájaros, con el aullido del lobo o el rugido del león".
                                                                     
              Por último, en estos dos vídeos se puede ver una mínima parte del maravilloso y didactico trabajo que llevó a cabo. Uno, no faltaría más, con nuestra perdiz roja, el otro, para no ser menos, con el lobo ibérico.




2 comentarios:

  1. Razón tenias cuando me dijiste por teléfono:
    Juan tenemos muchos puntos en común, ya veo que así es pues con esta nueva entrada, se me pone la piel de gallina...
    Parece que fue ayer cuando yo estaba muy pequeño y mi padre me compraba (de vez en cuando) algún fascículo de la serie fauna africana, recuerdo perfectamente a una leona cazando en posición de muestra al más puro estilo felino...(cosas que se te quedan grabadas en la mente).
    En otra ocasión, por estos lares se descubrió a una perdiz que había anidado en el tejado de un pequeño cortijo en ruinas, todos los críos de mi edad esperábamos que Felix viniese, cámara en mano a filmarlo tal y como nos lo contaban los mayores...
    A partir de ahí, ya no podíamos pasar sin él.
    Ya sabemos que también ha sido muy criticado por muchos cazadores (ignorantes) y no cazadores, argumentando que si todo era una farsa o un montaje, pero la verdad es que era la única forma de exponerlo en la pantalla, en esas fechas y con los medios que había, pero bueno allá cada cual.
    Saludos.

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  2. Puedo decirte que tengo casi todo lo que publicó y que flipaba viendo sus documentales.

    Puedo decir a boca llena que, para mí, era un auténtico fenómeno. Pocos como él.

    En mi casa, como en la tuya y como en la de miles de familias españolas, en cuanto sonaba la maravillosa música del Hombre y la Tierra se acababa todo. Sólo tele y "bichos". ¡Vamos, una maravilla!

    Un cordial saludo.

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