lunes, 10 de septiembre de 2012

SEGUNDA Y ÚLTIMA CON PERROS.




         Este sábado hemos ido al coto pasar unas horas juntos, charlar, tomar la cervecilla con algún "producto" de la tierra -incluido otro buen roscón preñao- y, de camino, pegar algún tirillo para matar el gusanillo. De esta forma, empezamos sobre las nueve menos cuarto, cazamos cuatro manchitas y volvimos para el cortijo con catorce conejos a las once y cuarto. Ya había para partir y el sol empezaba a caldear el ambiente.

        Como se puede ver, al estar el campo más bien flojito, no nos pasamos y en cuanto vemos que hay un conejito para cada uno, punto y final. Sí es cierto que el monte está lleno de rastros y cagarruteros, pero al haber mucha cueva, en cuanto el personal se huele el percal se quitan de en medio. Está claro que, cuando llegue el otoño/invierno y las lluvias, será otra cosa -con chimenea incluida para no aburrirse-, siempre cuidando al máximo de no colarnos para tener madre para el próximo año y esperando que la cría sea medianamente normal y no tan mala como ha sido en los dos últimos años por estos pagos.

          Por último, sólo decir que, la parte positiva y muy importante, hasta el día antes citado, es que no nos hemos encontrado con el más mínimo atisbo de mixomatosis. Enfermedad que otras temporadas ha hecho una buena "limpia" por estas fechas en nuestro coto. 




3 comentarios:

  1. Buena gestión cinegética y culinaria.
    Paz y tranquilidad para las perdices de la Dehesa, no me las molesten mucho por favor...
    Suerte con tu gestión un saludo.

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  2. Sirva esto, para demostrar una vez mas, que los cazadores somos los mas interesados en mantener nuestra flora y fauna en perfectas condiciones,
    para que nuestros predesesores,puedan disfrutarla
    al igual que lo hacemos nosotros.

    Saludos.

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  3. No sé si hacemos buena gestión o no, pero lo que sí es cierto que por falta de cuido no es.

    Aun así, llevamos varios años bajo mínimos, tanto en el conejo como en la perdiz y eso que ningún día del año le falta un grano de trigo en los 18 comedero fijos que tenemos.

    Este año, si ir más lejos, como dije en un post anterior las patirrojas han criado fatal y las parejas sin prole es lo normal.

    Está claro que la sequía de los dos últimos años, al menos por nuestra zona, está pasando factura. De hecho, aparte de la mala cría, de los tres pantanos que tenemos en la finca, dos se han secado y otro está con un buche de agua. Menos mal que nos rodea una rivera que aunque en esta época no corre el agua, tiene varios veneros y siempre hay un poco del preciado y fundamental líquido.

    Un saludo y esperemos que pronto aparezca el agua otoñal que tan importante es para nuestra flora y fauna.

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