Esta mañana, después de estar arreglada la segunda cuerna de los dos ciervos que he abatido durante la temporada recién acabada, las he colocado en el comedor de mi vivienda. No es que sean una cosa del otro mundo, pero para mí sí lo son, aunque sea por el simple hecho de ser las primeras. Es más, creo que han quedado hasta bonitas y, máxime, cuando el que me las ha preparado ha sido mi hijo Pablo que, para ello, tiene carnet de taxidermista expedido por la Deleg. de Medio Ambiente.
Esperemos que no sean las última, aunque los pisos no sean lugares más idóneos para colgar estos "cuadros". Pero, obviamente, hay lo que hay.
Estos son los dos trofeos del año.
Son muy bonitos tocayo, me recuerda cuando empece yo con los venados cochinos habia muerto muchos pero el primer venado jamas se me olvidara, lo mate en el socor en Villanueva de Cordoba con Gescaza hace muchos años me tire dos meses sin poder dormir esperando que llegara la monteria, no se pasaban los dias, que sepas que cada vez que pases por su lado no podras pasar sin mirarlo, y lo del piso que me vas a decir las mujeres cuando les quitas un cuadro para poner una cabeza algunas no se lo toman muy bien pero bueno se acostumbran, pues nada haber si el año que biene siges en racha. UN SALUDO.
ResponderEliminarAmigo j antonio hace tiempo que no te veo espero que esteis bien aqui viendo tus primeros venados estoy con mi hijo fernando y ha conocido el primer venado que mataste en los charquitos el cual nos fotografiamos con el.
ResponderEliminarBueno dale recuerdos a tu hijo y un abrazo de tu amigo el postor de calañas
Gracias a los dos.
ResponderEliminarEspero seguir juntando algunos trofeos en temporadas venideras, si Dios quiere.
Un saludo.
Amigo Jose Antonio, me gustaria que le hicieses una foto a ambas placas de los venados y las pusieran en este apartado de tu blog. Muchas gracias, un saludo
ResponderEliminarSr. Anónimo.
ResponderEliminarHe atendido su petición, aunque creo que no tenía la mayor trascendencia a la hora de escribir el artículo.
Igualmente, le solicito que cuando escriba, ponga su nombre. Así sabré a quien me dirijo.
Un saludo.