martes, 30 de diciembre de 2014

DE MONTERÍA EN LA SIERRA Y EL ANDÉVALO.

Otro fin de semana apretado en lo venatorio. El viernes 26, monteamos en Cortelazor una mancha de la finca La Coronada, haciendo mi hijo un doblete de venaos del terreno.


Ya el domingo en Calañas, se dio la mancha EL Chorrito que no se había monteado la temporada pasada y, a tenor de los resultados, se puede hablar de un gran éxito, puesto que, cinco o seis ciervos de buen nivel no se consiguen todos los día en una finca abierta, como es el caso.

Hablamos de 27 ciervos, 13 guarros y 14 “pepas”, es decir, 54 reses. Número que no está nada mal en los tiempos que corren y con lo que paga hoy por usar el rifle, aunque sea a ciervas.

En la misma, tanto a mi hijo como a mí nos tocaran dos puertas en una de las sueltas. Yo no disparé, mi hijo abatió un venadete, pero lo importante es que se mataron en las misma armada varios venaos de calidad y, entre ellos, uno con una cornamenta preciosas de trece puntas  que abatió Gregorio Núñez.


Cuatro imágenes de la montería del Chorrito. La primera nos muestra a Gregorio con su trofeo. En la segunda y tercera se puede ver a José María 
Ortega y José Gómez con los suyos. Por último, la cuarta nos muestra a mi hijo Pablo con su venadete.






También decir que, de vuelta para Huelva por Fuente la Corcha, cogimos un buen canasto de níscalos. que no estarán nada mal para preparar unos platos para Nochevieja.

Unos buenos níscalos con ejemplares de sus dos variedades.


viernes, 26 de diciembre de 2014

FIN DE SEMANA MONTERO.

Una vez dejado atrás la tradicionales Fiestas de la Navidad, quiero hacer una breve reseña del fin de semana venatorio pasado. Así, el pasado sábado, en la finca La Dehesa de Enmedio, echamos un rato de jabalí en mano, aunque lo de rato sea un decir, puesto que, debido a la intensa niebla con que amaneció el día no pudimos comenzar hasta pasadas las 13 horas.

Decir que, aunque el campo estaba con rastros de marranos por cualquier sitio, solo se  consiguió abatir una buena hembra. Del resto, que se suponía que estaría por cualquier rincón del coto, nada de nada. Ni verlos. Eso sí, el guarro que hace años que le seguimos la pista, le salió de los pies a un compañero que no llevaba escopeta en un pequeño rebujón de monte y, como no, tomó la dirección contraria a la que llevábamos los  que andábamos tras ellos.

Aun así, decidimos ir otro día para ver si más suerte, quitamos de en medio alguno más –si es posible el buscado solitario, mejor- y, de camino, eliminar el peligro que suponen para la cría de especies de caza menor que, por cierto, en lo referente a nuestra perdiz roja, la cosa está bastante bien, como pudimos constatar durante la jornada de caza.

Dos imágenes de la jornada sabatina. En la primera se aprecia la espesa niebla de la mañana. En la segunda, mi hijo Pablo con la cochina que mató



El domingo 21, en Calañas se monteó la mancha La Corte con unos números bastantes buenos en cuanto a cantidad, ya que a la junta de carne, en este caso en dos lugares diferentes, por cuestión de tiempo, llegaron 96 reses, aunque solo 11 guarros algunos venaos -sin saber el numero en este momento- y el resto, ciervas. De calidad, poco. Solo un bonito venado de catorce puntas, un buen marrano que, dicho sea de paso, rajó bien a un perro, y una buena cochina.

La jornada se alargó en demasía y la noche se nos echó encima a todos/as, principalmente a los compañeros que tuvieron que sacar a las reses abatidas. Tan es así que la última “remesa”, llegó casi a la medianoche a los locales de la Sociedad de Cazadores

Para mi hijo Pablo, la jornada fue un poco frustrante porque, aunque vimos siete marranos, no pudimos tirar ninguno, puesto que, no dieron la cara. Se movían por la costera de enfrente, tomaban un barranco que teníamos frente a nosotros y cogían el escape para derecha o izquierda, pero ninguno saltó al cortafuego donde estaba nuestra puerta. Solo un zorro se atrevió y perdió el pellejo. Eso sí, “pepas”, vimos el ciento y la madre. Igualmente, mi hermano Juanvi consiguió un venadete de ocho puntas.

Dos instantáneas del domingo. En la primera se ve al compañero José María Fernández con el trofeo conseguido (una buena cuerna de 14 puntas). La segunda nos muestra a mi hijo con el buen zorro que abatió. 



martes, 23 de diciembre de 2014

LAS PRUEBAS O CAMPEOS DE RECLAMOS.


          Cuando se acercan las fechas para el comienzo de la caza de la perdiz con reclamo, los cuquilleros solemos impacientarnos de tal manera que, para tranquilizarnos y hacer mas corto el tiempo que resta para el pistoletazo de salida, utilizamos como bálsamo reconductor, cuarenta mil historias. Una de ellas es el más que célebre campeo de reclamos sin escopeta. Pues bien, sirvan estas líneas que vienen a continuación para exponer mi punto de vista sobre tal eventualidad.

Antes que nada, quiero aclarar que, independientemente, de que el probar pájaros en el campo antes de la apertura de la veda sea una actuación legal o ilegal, cuestión en la que no me meto aunque tenga claro el tema, no voy en contra de quien lo lleva a cabo, ni mucho menos, puesto que cada uno sabe lo que tiene entre manos y lo que debe hacer con los integrantes de su jaulero. Ahora bien, el que se bueno o malo tal circunstancia, es otro cantar. Y sobre ella sí voy a opinar.

Creo y estoy convencido que, sí no hay tiro, en principio, no debe existir resabio de ningún reclamo, pero muchas veces comentemos el error de que, por sacar al campo a reclamos, principalmente pollos, que no están todavía en su mejor momento, con la buena intención de campearlos y, de camino, ver que es lo que tenemos en nuestro jaulero, estamos pasando un prueba a nuestros “alumnos” bastante complicada. Y es así, porque muchas veces, y me refiero fundamentalmente a noveles, no dan la talla, no porque no sirvan, sino porque no están en condiciones.

¿Qué pasa entonces, cuando ocurre lo anteriormente expuesto?

Pues bajo mi punto de vista u opinión, pueden suceder tres situaciones diferentes que merecen la pena  reseñar.

Primera: Si el pollo o ejemplar a prueba se harta de cantar y no escucha nada, porque el campo no está bueno, no pasa nada.  Pero…, si repetimos la operación varias veces, con los mismos resultados, circunstancia no anormal, nuestro futuro reclamo se aburrirá y, posiblemente, termine por no cantar cuando lo saquemos.

Segunda: Que el ejemplar que campeemos, no esté en su mejor momento. Si está tranquilo, aunque no abra el pico, no pasa nada, pero, si por el contrario, alambrea, está inquieto, da botes…, puede ocurrir que lo desechemos o soltemos, cuando si hubiéramos esperado a que se pusiera en condiciones, nuestra opinión hubiera cambiado. De hecho, en muchas grabaciones que vemos en foros o redes sociales se puede ver frecuentemente lo que estoy apuntando. Por ello, tengo la completa seguridad que muchos futuros buenos reclamos se han desechado por no dar el do de pecho en las pruebas, y no por no servir, sino por no estar en situación idónea.

Tercera: Que aun aguantando el tipo y no estando mal, se le venga un garbón campero de los de “capa y espada” y lo achante e, incluso, lo agache. En principio, quien hace eso es porque no sirve, pero, a veces, hay pájaros que actúan así porque no están en condiciones y no es bueno que su contrincante le gane la partida. Hecho que será difícil que olvide

Ante lo anteriormente expuesto, aun respetando al máximo a compañeros que campean a sus pollos, pienso que la paciencia, uno de nuestros valores más importantes, debe imperar en el aficionado cuquillero y solo sacar al campo a los reclamos y más aun a la savia nueva de nuestros jauleros, cuando estén en su sazón y en prueba real, con "armamento pesado” en nuestras manos.

Eso sí, el que tenga madera de figura, estará como el mejor desde el primer día, llevemos escopeta o no, incluso aun no estando encelado.

viernes, 19 de diciembre de 2014

CONCURSO DE TIMBRADOS ACO-HUELVA 2014


        Durante el puente de la Inmaculada, se celebró en los locales de la Asociación de Vecinos El Matadero de Huelva, el concurso de canto del timbrado español y timbrado discontinuo, organizado por La Asociación Colombina Ornitológica onubense (ACO), con los siguientes resultados según los jueces D. Moisés Pérez, para timbrados y D. Ginés Marín, para discontinuos.

EQUIPOS:
1º JOSÉ COBACHO TEJADA; 364 P. ; ACUSTE.
2º FRANCISCO OLIVARES PÉREZ ; 362 P. ; UCTE.
3º EMILIO MUÑOZ GALLEGO ; 361 P. ACUSTE.
4º JOSÉ A. ROMERO LLUCH ; 359 P. ; ACO.
5º ENRIQUE LAGO RODRÍGUEZ ; 353P. ; ACO.


INDIVIDUALES:
1º CIPRIANO SALAS BLANCO ; 91 P. ; C.E. CÁCERES.
2º ANTONIA BIZCOCHO GONZÁLEZ ;  88 P. CAURA.
3º DANIEL LÓPEZ SUERO ; 88 P.  ACO.
4º DANIEL LÓPEZ SUERO ; 88 P. ACO.
5º ANTONIA BIZCOCHO GONZALEZ ; 88 P. ; CAURA.


PÁJARO DE  MÁXIMA PUNTUACIÓN:
CIPRIANO SALAS BLANCO ; 91 P.. C. E. CÁCERES.


CONJUNTO DE SIETE MEJORES EJEMPLARES:
JOSÉ A. ROMERO LLUCH. ; 620 P. ; ACO.


CANTO TIMBRADO DISCONTÍNUO:
1º JUAN RODRÍGUEZ RENGEL ; 92 P.  ACO.
2º JUAN RODRÍGUEZ RENGEL  ; 92 P. ACO.
3ºJOSÉ L. PLAZA MARTÍNEZ ; 91 P.  ACO.


PREMIOS SOCIALES:
1º ANTONIO PERA BIELMAS. ACO.
2ºJOSÉ GARFIA QUESADA. ACO.
3º JOSÉ M. FÁBREGAS MOLINA. ACO.

        Sobre en mismo, decir que he participado por primera vez en un concurso de canto y, a tenor de los resultados, creo que no han estado nada mal mis timbrados, puesto que, un cuarto premio en equipos, primer premio en los siete ejemplares con mayor puntuación y seis canarios con 88 puntos en individuales es para estar muy satisfecho. Además, estos resultados me animan a seguir en mi línea de cría para conseguir mejores éxitos en los años venideros.

         En lo referente a la actuación de mis timbrados, dejo estos dos vídeos. El primero corresponde  al equipo que quedó en cuarto lugar con ejemplares amarillos procedentes de José de la Rosa y que obtuvieron una calificación final de 359 puntos. El segundo, un lote individual de la línea de José Luis Plaza obtuvieron 88 puntos cada uno de ellos.


jueves, 18 de diciembre de 2014

lunes, 15 de diciembre de 2014

PRESENTACIÓN DEL LIBRO CON JAULA A CUESTAS EN LA VI FERIA DEL RECLAMO DE BENAMEJÍ

El pasado viernes, día doce, en el Salón de Actos del Hogar del Pensionista de Benamejí, con motivo de la inauguración de la VI Feria del Reclamo, organizada por Jauleros Andaluces, presenté  mi tratado sobre la caza de la perdiz con reclamo Con la jaula  a cuestas.

En dicha acto, en la que también intervinieron la alcaldesa de la citada localidad, Dª María José Montes, el vicepresidente de la Federación Andaluza de Caza, D. Jorge Gabernet, D. Francisco Javier Cano, delegado de dicha federación en Córdoba, el presidente de Jauleros Andaluces, D. Francisco Reyes y el delegado de Percofán, D. José Miguel Trujillo, con algunos que otros nervios en los comienzos de mi intervención, hice un resumen del libro y, a continuación, respondí a cuantas preguntas se me hicieron sobre el mismo y sobre la actividad cuquillera, dejando claro que, mucho antes que cazador, hay que ser un enamorado de nuestra Naturaleza y Medio Ambiente y cuidarlos al máximo.

Imágenes de dos momentos del acto de Inauguración de la Feria del Reclamo y presentación de mi tratado/manual.


Al día siguiente, en la carpa montada para el evento y en la cafetería/restaurante del Campo de tiro Cerro del Viento, firmé ejemplares de dicho manual y departí, mientras se celebraba el concurso de belleza y canto de reclamos y durante el almuerzo, con infinidad de amigos y conocidos con los que comparto afición cuquillera o dueños de los stand que se montaron en la feria, dígase granjas cinegéticas, complementos para el cazador, hostelería y cotos para el reclamo, productos alimenticios… Además, y cómo no, adquirí varios pollos de Cinegética El Chopo y charlé largo y tendido con el hijo del propietario, Alonso Segura -un joven encantador-, sobre esta granja granadina que ha irrumpido con fuerza en el mundo del reclamo a base de ejemplares preciosos, con buen "juego" en el campo y que ha obtenido el Certificado de Pureza Genética a nivel andaluz, al igual que Perdices Pavión, con cuyo dueño también tuve el gusto de departir sobre los ejemplares expuestos y tipo de alimentación que ellos utilizan en los diferentes estadios de la vida de sus perdices.

Seis instantáneas del sábado. La primera nos muestra dos momentos de la firma de libros.En la tercera, se me ve al lado de la alcaldesa y del concejal de deportes de Benamejí y del presidente de Jauleros Andaluces. La cuarta nos muestra a Valeriano Burgos, campeón de España de perdiz con reclamo 2014. La quinta muestra a varios compañeros que se pasaron por la carpa de la feria. La sexta y última, con no mucha calidad, nos hace llegar un momentos de charla distendida entre varios amigos durante el almuerzo.







          José Miguel Trujillo, delegado de Percofán, también presentó el cartucho Midel Reclamun, ideal para la caza del reclamo, puesto que, su especial plomo, taco y carga evita totalmente los plomos rebotados que pueden herir a nuestros pájaros de jaula.

             Y como es de bien nacidos ser agradecidos, mi gratitud personal a Curro Reyes, Vicente Hurtado y otros compañeros de Jauleros Andaluces por el trato recibido en todo momento, tanto hacia mi persona como a la de mi mujer. A eso se le llama, aparte de aficionados al reclamo, gente cariñosa y acogedora.

  Para terminar, solo decir que este manual/tratado sobre la caza de la perdiz con reclamo, en el que he intentado, con lenguaje llano y sencillo, dar mi opinión sobre algunos aspectos de nuestra sentida, señorial y ancestral afición, se puede adquirir al precio de 12 €  -más 2,50 de gastos de envío- llamándome al teléfono 659-795495


miércoles, 10 de diciembre de 2014

DE MONTERÍA EN CALAÑAS. MANCHA LOS PINARES.

Si sobre la mancha Los Charquitos, hablaba de que las expectativas que existían sobre la misma no se hicieron realidad, sobre Los Pinares, tengo que decir todo lo contrario, puesto que, 8 cochinos, 6 pepas y 20 venaos, ni el más de los optimistas lo pensaba.

De esta manera, esta mancha, como su nombre indica, cubierta en la mayoría de pinar más un poco de eucaliptar, aunque no atrajo a mucha gente, en comparación con la anterior, los que sí fuimos, aunque pasamos un poco de frío los que nos tocó puertas de umbría, nos divertimos de lo lindo. Así, la mayoría de las armadas, abatieron reses y, puntualmente, hubo varios compañeros más de una.

En mi caso particular, con el número 8 de puerta de la armada El barranco del lobo, no disparé, aunque al cargar el rifle, con el correspondiente ruido del cerrojo, se levantaron, cerca de mí, un buen ciervo de 13 puntas –que abatieron las puertas anteriores- y dos ciervas. Sin embargo, mi hijo, con el número 12 de la misma armada sí se quedó con un venaete de 9 puntas. Aun así, tanto Pablo como yo disfrutamos de la jornada, porque por nuestra armada se movió mucho “material” y eso siempre es lo que, en principio, deseamos los aficionados.

De camino de vuelta hacia la comida, cogimos unos buenos níscalos -los hay en cantidad por la zona- que nunca vienen mal para prepararlos a la plancha.


Tres imágenes de la jornada. En la primera, se puede ver una de las reuniones durante la comida, con los hermanos Vega -Quico y Manolo-, que se trasladaron desde tierras extremeñas para la montería. La segunda nos muestra a tres Fernandos con trofeos de la jornada. Por último, en la tercera, se puede ver a mi hijo Pablo con el venaete que abatió.







domingo, 7 de diciembre de 2014

DE MONTERÍA EN CALAÑAS. MANCHA LOS CHARQUITOS.


Al César lo que es del César, amigo Carlos Carballar.

Me enorgullece felicitarte por un lance venatorio como el de ayer, puesto que, la última vez que hable de ti en este blog, como bien sabes, fue por una desgracia familiar. Por tal motivo, tengo que decirte que eres un fenómeno. No todos los días de abaten dos ciervos y dos marranos en una montería abierta como es la de tu pueblo, máxime, cuando uno de ellos es un buen venado como el que has matado.

Tengo que decirte que, muchas veces, los que empezamos en este apasionante mundo de las monterías, como es mi caso, y otros que ya llevan sus años, cuando nos enteramos de lances venatorios como el tuyo, podemos pensar que hay que ver la suerte que tienes, circunstancia que puede no estar muy lejana de la realidad. Pero luego, si es que ha existido fortuna en que, por tu puerta pasen cuatro reses, hay que hacer tropezar una balita en el cuerpecito de la que se le apunta, y eso ya no es suerte. A eso de matar dos venados que entran a la misma vez en una de las puertas, se le llama pericia y talento montero porque, como bien sabemos los que llevamos algunos años en el mundillo cinegético, hay que tener bastante aplomo para aguantar el tirón sin descomponerse y talento para dar en el blanco, como tú lo hiciste ayer y lo haces un día sí y el otro también. Y no lo digo por los dos venaos, sino porque sé, puesto que se lo escuché relatar a uno de los perreros que el segundo guarro que conseguiste no se queda con él todo el mundo. Por todo ello, y para no dar muchas vueltas, mi más sincera enhorabuena porque eres un montero con gran desenvoltura y destreza.

Pues una vez hecha esta introducción sobre la calidad del compañero y amigo Carlos a la hora de disparar con el rifle, hay que decir que, en general, la mancha Los Charquitos -encinar y monte bajo-, muy esperada año tras año por sus buenos números que siempre ha dado en cuanto a cantidad y calidad, no respondió a las expectativas que se tenían. Está claro que 51 reses (10 cochinos, 27 ciervas y 14 ciervos), aunque no está nada mal, no era lo que todos esperamos, incluyendo su dueño, el amigo Eduardo Ñudi, puesto que, no hace mucho, según palabras de algunos monteros que conocen bien la citada finca, había en la mancha bastantes guarros y venaos y ciervas. Pero se ve que, con el paso de los días, el “personal” se ha movido para otras zonas.


          Imagen donde se puede apreciar el buen ambiente antes del sorteo de puertas.

En mi caso, tengo que decir que me tocó la misma armada del año pasado –Huerta/Cobijar-, donde abatí un buen venao de trece puntas. Pero este año, siendo el postor de la misma, el amigo José Manuel Gómez y habiéndome tocado en suerte una preciosa puerta con gran y amplia visión, la número 15, no ha podido ser. No porque no haya disparado, sino porque al venaete que me entró –de ocho/nueve puntas-, viéndolo desde bastante lejos y avisado por varios rehaleros, me lo dejé venir como se debe hacer, pero cuando lo tenía a huevo, incompresible y torpemente lo fallé. Está claro que la falta de oficio montero, a día de hoy, me acompaña. La prueba está en que solo le disparé una vez, cuando hubo tiempo y terreno para poderle haber soltar los tres tiros. Por tanto, no puede haber escusas. Se me fue y punto. Además, mi hijo Pablo, en la misma armada y puerta 12, no disparó. Ciervas, varetos y horquillones fueron lo que circularon por su tiradero.


Dos imágenes de la jornada. En la primera se puede ver a Carlos Carballar con los dos guarros que abatió. En la segunda, Carlos posa con mi hijo Pablo y el trofeo del buen venao que consiguió.



viernes, 5 de diciembre de 2014

LA MAGIA DE LAS SETAS.

Nuestra madre Naturaleza siempre nos ofrece tesoros de una belleza inigualable. Pues bien, uno de ellos son las fascinantes, mágicas y misteriosas setas. Y es así, porque estos componentes de nuestra flora mediterránea encierran ese encanto especial que les da la belleza que encierran por su maravilloso colorido y ese tufillo a peligro máximo que encierran cuando se habla de  llevárselas a la boca formando parte de exquisitos platos.

De esta forma, cuando el otoño es lluvioso y poco frío, como es el actual, nuestros campos están adornados, aparte de otras especies de vegetales, por un sinfín de ejemplares del llamativo reino fungi. Así, sin ir más lejos, ayer, mientras me daba una vuelta por mi coto para dar un vistazo y rellenar los comederos de trigo, pude comprobar como nuestras fascinantes y, en muchos casos, buscadas setas poblaban la mayoría de los rincones de la finca. Consiguientemente, Amanitas, lactarius, agáricus, lepiotas y otras especies forman parte de ese atrayente y encantador mundo de la micología, del que me siento un fervoroso enamorado y asiduo setero.


Ocho instantáneas de diversas setas. Las tres primera pertenecen a la bellísima Amanita muscaria, una seta alucinógena. La cuarta es un Agarícus campestris, champiñón silvestre. La quinta es el conocido Lactarius deliciosus o níscalo. La sexta es una lepiota. La septima es un Lycoperdon perlatum o "peo de lobo" y, por último, la octava es una Amanita vaginata/mairei.









Por si fuera poco, pude comprobar que nuestra auténtica perdiz roja sobrevive a pesar de la muchas trabas que le ponemos para salir adelante. En esta línea, puedo decir que La Dehesa, el coto en el que llevo 15 años, todavía es un rincón de nuestra Comunidad donde no se ha repoblado con perdiz de granja, lo que hay es Alectoris rufa y, como pude apreciar ayer, hasta con bandos de 17 ejemplares.

           De camino, decir que como hay tiempo para todo estuvimos el amigo Pepe Moyo y yo preparando algunas plazas para que, cuando llegue el momento, las camperas extrañen lo mínimo posible. Así, la siguiente imagen nos muestra una de ellas: al fondo estaría el aguardo y en primer plano el tanto o farolillo.



lunes, 1 de diciembre de 2014

LA PICAÍLLA DE SAN ANDRÉS.

No hace mucho, el 15 del mes pasado, escribí en este blog un artículo titulado No le pidas peras al olmo. Pues bien, sobre el mismo tengo que decir que, otros tantos días después, el 30 de noviembre, durante el transcurso de una jornada montera celebrada en Calañas (Huelva), pude apreciar el machaconero canto de un macho de perdiz autóctona en el lomero que tenía frente a la puerta que me correspondió en la montería.

Curiosamente era el día de San Andrés, festividad de la picaílla del mismo nombre y de la que nuestra tradición cuquillera habla y no para. Y es así porque, antaño, por estas fechas, ya bien metido el otoño, por aquellos entonces una estación como Dios mandaba, nuestras perdices salvajes ya se habían enverdinado y empezaban las primeras luchas por la supremacía de los diferentes bandos. De esta manera, los cantos en diferentes momentos del día y, principalmente, en las primeras horas de los mismos, no se hacían de rogar, ya que era lo normal y corriente. Ahora bien, de ahí a la separación en colleras quedaba un trecho.

Sin embargo, bastantes años después, en dicha fecha, como pude comprobar ayer, ya hay parejas de patirrojas en nuestros campos. Cuesta trabajo creerlo, pero cuando llegaron los perros a las cercanías de mi puesto, el macho que había estado cantando durante toda la mañana voló por lo alto de mi cabeza, pero, solamente, acompañado de su pareja, de nadie más. Lo que vino a  aclararme que en dicho lugar ya había una pareja de perdices. Es más, esta noche charlando con mi amigo Pepe García, me ha confirmado lo expuesto: el su coto del Cerro de Andévalo, ya ha visto varias colleras y, además, en plan dale que te pego con el cante.

Por tanto, con lo anteriormente expuesto nos deja bien claro que, lo que está ocurriendo en muchas facetas de la vida en los momentos actuales, no hay quien lo entienda. Debido a ello, los trescientos sesenta grados -máximo giro-, cuando hablamos de los cambios que se vienen produciendo en nuestra Naturaleza, se quedan pequeños.