miércoles, 19 de diciembre de 2018

FELICITACIONES NAVIDEÑAS

     Con mis mejores deseos para todas/os los visitantes de este blog y sus respectivas familias


jueves, 13 de diciembre de 2018

UN MAGNÍFICO OTOÑO SETERO.

          El otoño, tradicionalmente, siempre ha sido una estación meteorológica lluviosa y que, además, al ser frontera con el verano, en los primeros momentos del mismo, la gran mayoría de las veces, suelen ser templados. Por tanto, agua y temperaturas agradables son las dos premisas fundamentales para que sea una época setera por excelencia. Consecuentemente, en los años así, a las mágicas representantes del reino fungi las podemos encontrar en cualquier sitio, como de hecho está ocurriendo en lo que llevamos del actual. Así, con la tierras subidas de temperaturas debido al largo aunque no muy caluroso verano, los boletus  –tontullos o tentullos- y las Amanitas caesareas –tanas- han hecho las delicias de cuantos aficionados a la recolección de setas han salido al campo en su busca en terrenos de encinar, castañar y alcornocal... 




      A continuación, los Agaricus campestris –champiñones silvestres- y las Macrolepiotas proceras –gallipiernos- se podían encontrar en cualquier terreno estercolado por el ganado.



 Para finalizar, ya por estas fechas, los Lactarius deliciosus y sanguifluus –níscalos-, las Lepistas nuda –pies azul- y las Cantharellas cibarius –chantarelas o rebozuelos- y otros muchos son verdaderos tesoros que llevar a nuestras mesas.




Ahora bien, hay que tener muy claro que no nos lo podemos jugar a setas, pues recoger ejemplares de ellas sin tener mucha idea del tema puede ser, como de hecho es a veces, fatal. Pues no sería el primero que perdiera el pellejo en el envite. Tan es así, que también por estas fechas suele ser relativamente normal tropezarnos con la delicada y bellísima, pero mortal Amanita phalloide, un ejemplar que produce anualmente muchas muertes en nuestro país.



Pero además, un buen año de setas corre paralelo a una posible buena temporada de caza de perdiz con reclamo, pues ambos tienen “ingredientes” comunes. Terreno húmedo, mucha hierbas y temperaturas suaves y agradables, lo que hace años era un formidable celo del rabanillo. Ahora, que no se puede llevar a la práctica lo citado en último lugar, por no ser legal, esperamos impacientemente la apertura del periodo hábil con unas condiciones climatológicas formidables. Luego, el tiempo dirá, siempre que en la mata haya música y sapiencia.


miércoles, 5 de diciembre de 2018

TERTULIAS CUQUILLERAS

Cualquier afición debe reunir a personas que compartan sus pensamientos, opiniones, sensaciones, ideas, situaciones vividas, anécdotas… sobre la misma, ya que si no fuera así, ninguna de ellas perduraría en el tiempo, pues no tendría sentido practicar una determinada actividad, sea del tipo que sea, y ahí se acabó todo. Y si la actividad que se practica es la caza y todo consistiera en salir al campo a ponerla en practica y volver a casa con unas determinadas piezas abatidas y punto y final, haría mucho tiempo que lo cinegético o venatorio habría desaparecido, pues como bien sabemos el apretar el gatillo, la mayoría de los casos, es lo de menos. Es mucho más importante el compartir con otros compañeros que sienten en la misma dirección lo que ha ocurrido en cada lance en el que hemos participado. De esta manera, las tertulias cinegéticas se transforman en un importante medio para que una determinada modalidad de caza no se vaya al garete, sino que se fortalezca.

En esta línea,  nuestra afición cuquillera no iba  a ser menos y, desde siempre, las reuniones de amigos y compañeros para contarse todo lo relacionada con ella han sido el medio fundamental para que, a día de hoy, sea una modalidad de caza seguida por infinidad de fervientes practicantes. Chimeneas de cortijos, barberías, tabernas y bares, diferentes locales… desde siempre han sido lugar de reunión de infinidad de pajariteros. De esta manera, además de hablar de los muchos problemas que azotan a tan emblemática forma de caza, el poner en conocimiento de los compañeros el gran puesto que nos dio Fulanito, la mocholada que nos endosó Sutanito o una de las muchas anécdotas que a todos nos han pasado es la salsa de nuestra controvertida y ancestral afición.

Pues bien, como en años atrás, aquí en Huelva un grupo de amigos aficionados al reclamo solemos reunirnos de vez en cuando para charlar sobre todo lo que rodea a nuestra afición y contarnos multitud de batallitas sobre la misma. Así, bien en algún bar conocido o en mi garaje, Joaquín Moyo, Fernando Feria, Ángel Almendrote, David Soto, Gaspar Gómez, Manolo Monescillo, Manolo Jariego, Antonio Bermejo y quien suscribe nos solemos reunir para echar el rato hablando del reclamo y de paso tomar unas copas y degustar algún producto de la tierra. Máxime cuando cada día nos acercamos más  a la ansiada y esperada apertura del periodo hábil de la caza de la perdiz con reclamo.

Tres tomas de diferentes días en los que los componentes de nuestra Peña el Reclamo nos hemos juntados para charlar largo y tendido sobre nuestra afición cuquillera. Es obvio, que ella necesita de estos momentos, pues siempre han sido parte fundamental de nuestra tradición pajaritera