Durante cuatro días, que en principio puede parecer una
locura, aunque nunca más lejos de la realidad, he estado en Ejea de Los Caballeros,
Zaragoza, con la Sociedad de Cazadores de la localidad, haciéndoles llegar “in
situ” lo que es y significa la caza de la perdiz con reclamo macho y, por
supuesto, su importancia a la hora de realizar una caza selectiva, cuando en un
determinado terreno, en este caso la friolera cantidad de 54.000 hectáreas, abundan muchos ejemplares de machos
viejos que, ni crían, ni dejan criar, como es el caso.
Así, en su momento, el Presidente de la Sociedad, Andrés
Celma, se pone en contacto conmigo, para explicarme el tema de la disminución de la cría en los últimos años y que le diera mi
opinión sobre el tema, lo que supuso, después de intercambiar información, un documento sobre las ventajas de poder
realizar un descaste de machos, en una Comunidad en donde la caza de la perdiz
con reclamo no está permitida.
Debido a ello, la sociedad presentó en Medio Ambiente de
Aragón toda la documentación pertinente para solicitar un descaste de machos viejos y, en base a ello, se aprobó, de forma puntual y
de prueba, dicha actuación en 2025.
Por tal motivo, el martes pasado, me trasladé por carretera hasta dicho lugar, sobre 950
Kms, para aportar mi granito de arena en pro de la caza con
reclamo de perdiz e informar a la directiva de la Sociedad en qué consiste tal
modalidad cinegética, forma de llevarla a cabo, su importancia, grandeza e historia de la misma y, por supuesto, dejar claro que cazar el reclamo no es poner un pájaro en el campo y acabar con todo lo que aparezca por el colgadero, leyenda negra que siempre nos ha acompañado, para intentar tirar por tierra la noble y ancestral afición pajaritera.
Tres momentos puntuales en terrenos de Ejea de los Caballeros
Pero, como siempre hay un hándicap en esta forma de caza, el célebre viento del Cierzo
nos ha jugado una mala pasada, ya que durante los tres días que salimos al
monte, como ellos dicen, casi se llevaba volando el portátil, por lo que, lo que iba a ser una semana, se ha reducido a cuatro jornadas pues, con las condiciones que había, era
imposible salir a dar el puesto con éxito.
Para terminar, independientemente de la malajada de la
parte meteorológica, ha sido una experiencia única por muchos motivos, pero, principalmente, por el exquisito y formidable trato que he recibido por parte de
Andrés, el presidente de la sociedad, Miguel, el guarda y el resto de miembros
de la directiva. Por tanto, vaya desde aquí, mi más sincero agradecimiento por
todas las atenciones recibidas, esperando que todo lo que les he trasladado,
haya estado a la altura de los que esperaban de mí y que, por lo tanto, hayan
sacado muchas cosas en claro de lo que significa ser cazador de reclamo.
Además, espero que lo de este año no haya sido flor de un día, sino que, en las temporadas venideras, sean aprobados los proyectos que presente esta sociedad de
cazadores y alguna otra de esta Comunidad, para poder cazar la perdiz con reclamo.
Por supuesto, no puedo olvidar, porque no sería de recibo, a un gran pajaritero aragonés, José Ignacio Pérez Albericio, por su inestimable ayuda en todo lo relacionado con el conocimiento de la zona.