https://www.youtube.com/watch?v=drO0-FjWELs
Por primera
vez, aunque siempre la hay, me he equivocado. A medias, pero he errado. Y es
así, porque hasta la fecha, algunos años como comprenderéis, nunca se me había
escapado una hembra por macho. Siempre, a las primeras de cambio, las había
detectado y les había dado largas o regalado. Pero esta vez, por eso digo
a medias, no lo he tenido claro. Por
ello, consulté a varios compañeros, entre los que te encuentras si lees este
artículo y recibiste mi wassap. Y hubo de todo, macho seguro, hembra seguro y mitad y mitad. Pues
bien, como dice el refrán pajaritero, "a la menor duda, hembra". Y así ha sido.
Galindo no es Galindo, es Galinda. Y lo es porque, hoy, sobre mediodía, después
de sacarla al sol un rato y cantar todo lo que pudo, me encuentro la gran
sorpresa: un huevo en el fondo de la
jaula. Ahora no hay dudas, hembra. Circunstancia irrefutable e
incontestable. Y eso que la prueba de la aguja colgando había dado macho al
pendulear la misma.
Mis grandes
dudas venían de su buen canto de mayor, para mi de macho, como se puede apreciar en el vídeo de entrada, aunque ahembrado. Es más, a las dos hembras que le entraron este año las recibió de cuchicheo y con buena planta en el campo y sin bregar ni tomar un alambre en los puestos de prueba que se le dio,
aparte de picarme en las manos al echarle la comida o golosinas.
Dos imágenes del huevo puesto hoy.
A partir de ahora, habrá que buscarle un buen macho y echarla en casa de un amigo que tenga un lugar apropiado, para intentar sacar algún pollo con futuro.
Gracias Elena por acercarse por el blog.
ResponderEliminarDe hecho, hace ya muchos años, más de uno y mas de dos cogían nidos de perdices para hacer una tortilla.
Saludos.
Hola,saliste de dudas amigo,el regalito sorpresa es la prueba definitiva,de todas formas dices bien al nombrar ese refran antiguo,casi siempre por no decir siempre se acierta con el,saludos desde estepona.
ResponderEliminarJajaja, ya te dije que tu abuelo llevaba razón. ¡Te lo confirmo ella mismo!. Un saludo.
ResponderEliminarhal megor hescrivano le sale un voroN jajajaja.
ResponderEliminarElla te encandiló con cantos de sirena y no te acordaste de aquél fandango de cacería de Juanito Valderrama que decía " Al alba piñoneando ver al reclamo cantar..."
En cualquier caso tubiste suerte que no te pescaron los de verde...en plena faena.
Y precisamente la hembra destaca por la ausencia de piñones y no por la presencia de otras melodias que se utilizaban antaño por el mes de Mayo como ya sabemos, cuando se cazaba con la hembra...(véase el significado de piñonear).
Dices que te entraron hembras en plaza, algo normal considerando que venían a "la fiesta" o bien a defender terreno...
Saludos.
Pd. Las nidadas van en aumento.
migos Antonio y Rafael:
ResponderEliminarNunca lo tuve claro. Por eso, cada día me voy convenciendo más de que sexar perdices, al menos por su fisonomía externa, es altamente complicado. Galinda, es una prueba de dicha máxima.
Cantarina en casa y en el campo, mansa, incluso picando en las manos, recibiendo curicheando y embolada... en una palabra, todo los condicionamientos para dudar. Pero está claro que, al final, si se duda, hembra.
Es una pena porque desde el primer día sabía que fuera. lo que fuese tenía futuro, algo me lo decía. Pero no tengo posibilidades de echarla con un bue macho, porque no tengo sitio.
Aunque si no encuentro a alguien apropiado y serio, me quedaré con ella, puesto que, ahora que me van a desocupar el buen garaje que tengo, habrá sitio de sobra. Con ello se encelarán mejor los reclamos flojetes. Y no debe haber problemas porque, este año han estado todos juntos y ha sido una temporada, al menos para mí, formidable.
Saludos.
Pues si Juan Luis, a todos se nos escapan, a veces, detalles. Pero al ser pollo, la falta de piñones, puede ser normal. Ahora está claro.
ResponderEliminar¿Conoceis las vicarias?, pues eso son los pájaros que les gustan la carne y el pescado y eso es una alegrìa ya que trabajan los dos palos el macho y la hembra.
ResponderEliminarLos que ya llevamos muchos años cazando nos han entrado pajaros enmoñados en la plaza creyendo que es macho y cuando los hemos matado creyendo que eran machos al final era ella.
La vida nos da sorpresas como dice la canción.
Raimundo.
Pues sí Sr. Raimundo, la ya Galinda, seguro que es una vicaria o machorra, como se suele decir en nuestra terminología. Pero el problema es que cuando se sabe que es hembra ni se quiere, ni se debe, ni se puede, por mucho campo que pueda meter en plaza.
ResponderEliminarUna vez resuelta la duda, no queda otra que echarla a criar o dejarla en casa paea que ponga a mil por hora a los reclamos. Aunque a mí, este año, no me ha ido mal. Y ella estaba al lado de todos ellos.
Saludos.
A mí me ha pasado lo contrario.
ResponderEliminarTengo una voladera en el campo, donde tengo un pollo del año pasado que fue herido en una cacería al salto, allí lo dejé y suerte que se recuperó, este no había dudas que era macho, marcaba unos suaves espolones y aún tenía plumas en las remeras que denotaban que era pollo del año, eran los primeros días de octubre…....Bien, este año en el mes de diciembre me hice de otro (gracias a mi podenca que los trae mejor que yo con las manos), “esta”, otro pollo del año, fina y elegante, sin espolones y sin ningún rasgo que dijera lo contrario, dije, hembra!! ya tengo pareja.... Pues bien, pasa el tiempo y donde pica el macho allá iba ella….digo a que crío?,… mi gozo en un pozo!!.
El último fin de semana de abril, estoy en el campo, escucho un pájaro cantar, y digo parece que hay dos machos en duelo…. Arsa! los observo desde la ventana y los piñones eran tiros de uno al otro. Entro en la voladera y ni se mueven, mirándose uno al a otro, meto al más nuevo en el cajón y cuando le toco las patas, zass!! resulta que le han salido los espolones…. A sí que ya tengo otro reclamo más. En mi caso Paka se ha convertido en Pako.
Un saludo.