Quiero aprovechar este blog para
dedicarle unas cortas y torpes líneas a quien fue un gran aficionado a la caza de la
perdiz con reclamo, mi primo y uno de mis maestros en las lides cuquilleras, Manuel Jerónimo
Lluch. Un buen hombre que nos dejó el pasado lunes, 15 de enero, al alba,
cuando en el horizonte ya se divisaba el nuevo día y sin la más mínima queja
ante los fatales males que sesgaron su vida, aun siendo todavía una persona joven.
Manuel Jerónimo, aparte de haber llevado
una ejemplar vida familiar y profesional, practicó desde siempre, con señorío y a la vieja
usanza, nuestra ancestral modalidad cinegética y, por supuesto, compartió sus vivencias, sensaciones y
opiniones en cualquier reunión de aficionados al reclamo, en las noches de chimenea en el cortijo y en multitud de
artículos y relatos publicados en diferentes medios, principalmente en la revista Trofeo Caza. En todos ellos, con una pluma
fácil, con una prosa de calidad y cargada de sentimiento, tradición y
conocimientos, nos hizo llegar, a quienes los leíamos asiduamente, la esencia de
tan maltratada y milenaria afición. Así, fenomenales puestos, encantadores paisajes rurales,
pájaros punteros y personajes lugareños tomaron vida en sus escritos con un encanto
especial, además de hacer en todo momento hincapié en el cariño y defensa de la Naturaleza. En una palabra, escucharlo o leer lo que salía de su pluma siempre fue y será signo de aprendizaje, pues de sus adentros continuamente ha brotado sapiencia y respeto máximo hacia todo lo que rodea a nuestra milenaria modalidad de caza.
Por todo ello y porque es de justicia y de humanidad hacerlo, gracias Manuel Jerónimo. Sin pedir nunca nada a cambio, nos regalaste mucho a todos los que como tú, amamos a la caza de la perdiz con
reclamo. Y que sepas, estés donde estés, que tus historias seguirán siempre
vivas, aunque nos hayas dejado para siempre. Muchas personas y lugares nunca se olvidarán de
ti.
Desgraciadamente no conocerás, como
era tu ilusión, la nueva temporada que se nos avecina, pero seguro que te alegrará saber que, lo que siempre defendiste, con alma y corazón, la caza de la perdiz con reclamo, perdurará en
el tiempo, pues has hecho mucho por ella. Tu legado cuquillero siempre seguirá vivo.
Descansa en paz, mi querido Manuel Jerónimo, te
lo mereces de sobra. Seguro que tu Virgen
del Robledo te ayudará a ello.
Descanse en paz. Se nos ha ido con el principio de la temporada. Cuántas ilusiones dormidas habrá vertido en años anteriores.
ResponderEliminarDescansa y no tengas dudas de que, los que te han querido notarán tu ausencia.
La vida trae estas jugarretas que nos trastabilean y emocionan.
ResponderEliminarSeguro le haces homenaje muy pronto y en su sitio, que es el nuestro,,,campo,jaula y perdiz
....entro buscando un buen comienzo de temporada y me encuentro con una triste noticia...D.E.P.
ResponderEliminarÁnimo!, un abrazo a la famila.
Gracias a los tres por vuestras palabras. Estoy seguro que Jerónimo también os las agradecerá, pues también era un hombre tremendamente agradecido.
ResponderEliminarSaludos.