domingo, 10 de enero de 2021

EL BUEN RECLAMO, DESDE EL PRIMER DÍA

 

        Este artículo ya ha sido tratado ampliamente en este blog en diferentes posts, pero dada su importancia y la diversidad de opiniones que existen sobre el tema quiero exponer, una vez más, lo que yo pienso al respecto, tras vivir formas de actuar o proceder de todo tipo de aspirantes a reclamos que han pasado por mi jaulero. Es más, hace poco, en un comentario llegado al blog, decía un aficionado y amigo que el “culo” es el que hacía a los pájaros de jaula, circunstancia que, como se comprobará al leer este artículo, no comparto, aunque bien es verdad que la paciencia con los reclamos es una de las principales virtudes del cuquillero.                                  

                                       oooooo O oooooo


     Este tema, lo tengo tan claro, que creo no equivocarme al afirmar rotundamente -aunque, como dice un amigo, las matemáticas no existan en esta modalidad de caza- que el buen reclamo, el pájaro de bandera, aprueba con nota desde su primer contacto con el campo, incluso no siendo el mejor día para el debut. De hecho, Chimenea, mi mejor reclamo de mis casi setenta años, debutó, por un error mío, en una mañana infernal de viento y agua y, tras dar un puesto inolvidable, conseguí abatirle una hembra de esas que no se le tira a cualquier pájaro de jaula.

        Aunque teorías sobre el tema las hay de lo más diverso, y todas muy respetables, mi experiencia personal cimenta la afirmación del párrafo anterior. Sea el más vistoso, el más feo, el más fuerte, el más canijo..., en cuanto lo destapamos por primera vez, y para satisfacción nuestra, saldrá cantando como si estuviera curtido en mil batallas. No le importará si hace frío o calor, si hace sol o llueve, si es por la mañana o por la tarde... Luego, con ese encanto especial que le acompañará toda su vida y que irá acrecentando día tras día, atraerá a las camperas con una facilidad pasmosa. Esté la temporada buena o mala o el campo virgen o resabiado, pocas patirrojas se resistirán a su llamada. Más tarde, una vez las montaraces en plaza, las “tomará” como si fuera un veterano y, tras el tiro, hará un entierro en toda regla, independientemente que la campera de turno haya quedado seca, aleteando, botando e, incluso, volando por estar sólo herida o no haber recibido ni un plomazo.

        Está claro que, de los anteriores, rompen pocos e, incluso, es posible que algunos aficionados no lleguen nunca a tenerlos en sus manos. Por lo tanto, cuando muchos de ellos hablan de fenómenos o reclamos de campanillas, lo que están haciendo es sobrevalorar a pájaros trabajadores que, cuando llegan los momentos difíciles, no dan la talla. Pájaros a los que se les tira cacería, pero cuando ésta entra bien y no da mucho la lata. Si así ocurriera, entonces la cosa cambia: nerviosismo e inquietud, pechazos a la jaula, patita “parriba y pabajo”, cantes a destiempo, alambreos y guitarreos...

        Lo del párrafo anterior es el pan nuestro de cada día en cualquier casa de vecino y, en la mía, para no ser menos, también. La ilusión llega a nuestro cuerpo en el mes de octubre/noviembre con la adquisición de pollos y el correspondiente recorte de los mismos. Poco a poco, con sus primeros cantes, bulanas... e incluso titeos al comer algunas golosinas, nos van haciéndonos pensar que a nuestras manos ha llegado la “joya de la corona”. Pero esa joya, no está al alcance de todas las manos. Lo normal es que, una vez en el farolillo, no abra el pico o, si lo abre, tras unos cuantos reclamos, comenzará el alambreo o los botes. Si hay más suerte, puede que incluso atraigan al campo, pero cuando este se le acerque, o silencio o aplastamiento.

      Pues bien, muchos de esos pollos seguirán en nuestro jaulero ante la esperanza de que el año próximo la cosa cambie e, incluso, muchas veces, nos acompañará varios años. Pero al final, jaulazo tras jaulazo, y enfado tras enfado, nos daremos cuenta que el pájaro de turno no sirve y, por lo tanto, hemos estado perdiendo el tiempo durante varios años.

        Resumiendo: creo y casi setenta años avalan mi opinión que, el reclamo puntero, el que luego se transforma en el líder de nuestro jaulero y personaje principal de nuestras historias, trae en sus genes la clase. Por tanto, desde el primer puesto, la da a conocer y la pondrá en práctica. Es más, incluso haciéndole una barbaridad en ese estreno, seguirá siendo un primer espada. Obviamente, el buen proceder de su dueño reforzará su calidad y, lo contrario, puede, sólo puede, estropearlo. En mi caso particular, dos de los tres pájaros de primer nivel que he tenido en mi vida -el de Manué y D. Benito-, presenciaron, el día de su debut, cómo las camperas les botaban en sus narices después del disparo por plomos de cabeza y no ocurrió nada.

        Todo lo demás: que si tiene poco celo, que el campo no está bueno, que el tiempo no acompaña, que el campo se quedó botando, que no le ha gustado el tiro..., son paños calientes, mentiras piadosas que nos contamos a nosotros mismos para no ver lo que un ciego sí lo hace: el reclamo de turno, que posiblemente nos tenía enamorado por las cosas que en casa le observábamos, no sirve; es decir, es un auténtico mochuelo.

          Por tanto, el manido debate de si el pájaro nace o se hace, para mí no existe -aunque pueda haber excepciones y, por lo tanto, grandes errores al no darnos cuenta de la valía de un determinado neófito-, ya que tengo muy clarito que, como dije al principio, el reclamo es como el pintor: artista desde que coge el primer lápiz en sus manos.


6 comentarios:

  1. José Antonio, los pájaros se hacen con el culo, pero el de otro, yo soy de la misma opinión que la suya, les doy culo hasta cierto punto, tengo uno que era una auténtica belleza en el tanto, no movía una pluma, para no mover ni movía ni el pico, 4 temporadas estuve dándole oportunidades, hasta que por fin me di cuenta que no, que no servía para estos menesteres, así que aproveche que tenía una perdiz en el voladero y dos años lleva con ella, y se ve que para el amor sirve 😂, ahora tengo un par de hijos de este año que los tengo que probar por si han saldo a la madre.
    También tengo uno, que de pollo en su primera salida le abatí una collera y por error mío creí tirar el macho pero era ella, saliendo el par de la plaza de vuelo. Después del entierro volvió con la pelea y después de un buen rato consiguió meter al macho, se lo abatí y desde ese día vi que algo tenía, de hecho volvió a salir un par de veces más y en ambas le abatí un macho y otra collera. Es uno de mis pájaros punteros, hasta el punto que el año pasado le fallé un pájaro y el a lo suyo, entierro y pelea buscando el par, lo que pasa que era una viuda y el no lo sabía 😅.
    Estoy contigo en eso de que hay pájaros que se hacen, otros que nacen pero hay otros que ni hacen ni se hacen. Un saludo y buena temporada que ya mismo estamos pasando frío.

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  2. Buenos días J. Antonio. Gracias por el post, sin duda de sumo interés. No puedo estar más de acuerdo con tu exposición y razonamientos. El que va para pájaro selecto/sobresaliente o de bandera se le ve desde el primer día. La materia prima que posee es evidente. Sólo hay que cazarlo como mandan los cánones y saber interpretar de forma correcta su lenguaje (verbal y de signos). El pollo ya muestra evidencias de lo que puede llegar a ser y el algarin, según mi experiencia, te dice lo que es desde el primer día (éstos ya saben latín y se cazan de manera distinta). Este tipo de pájaros, únicos, crecen con los tiros. Para ellos no existe día malo (aire, frío, agua o calor). Tiran de recursos y precisamente es lo que los diferencian de otros reclamos de clase inferior. Saben dar en todo momento a las perdices lo que necesitan. Quería añadir algo más: el buen aficionado debe darse cuenta de lo que tiene entre manos. Son muchos los reclamos que se quedan en el camino por falta de experiencia y conocimiento.
    Un abrazo para todos

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  3. Buenos días José Antonio.
    Cierto es que hay pájaros que te sorprende con el tiempo,pero son los muy pocos que van de peor a mejor....muy pocos,estoy totalmente de acuerdo con Tigo,el pájaro que es bueno lo es desde que pisa por primera vez el campo y pongo un ejemplo-relato del que para mí hasta el día de hoy a sido mi mejor pájaro.
    No sé si te he contado alguna vez lo de mi pájaro Alatriste,pues bien,sería el mes de octubre cuando un grupo de amigos fuimos de caza en mano a la perdiz,en esto se se me arranca un pájaro en el filo del monte y lo abato,mi perra lufi bretona de gran poderío sale detrás de ella por qué cayó alicortado y tras cobrarla y traermela observo que era un pollo muy bonito, bastante tocado del tiro en un ala pero bueno dije,al morral y a seguir cazando.Mi sorpresa fue que después de tres horas metida en el morral y cuando fuimos a repartir la caza como buenos compañeros,el pájaro seguía vivo y me lo llevé para casa.
    Despuée sus cuidados y para no extenderme mucho llegó la temporada del reclamo y justo el último día de caza allá por el 10 de Marzo pensé....y si saco a mi Alatriste a ver qué hace??
    Pues dicho y hecho,al campo con el.
    Puesto de 10,una ladera medio bajera de la finca donde cazo y tanto de Medio chaparrte cortado e idílico para poner el pájaro,en fin vamos al lío a ver qué tal.....cuando tiro de la sayuela el pájaro quiero, serio,observando el campo, perfecto dije yo,y me voy hacia el puesto,me siento y mis ojos y oídos no daban crédito a lo que veían y escuchaban!!!!!
    Virgen del Amor Hermoso!!!! Dije yo.....no me lo podía creer,el pájaro reclameaba y tiraba piñones como si llevara toda la vida cazando.
    Pues después del expectacular puesto y tras debutar con dos pares de perdices abatidas,saque la conclusión de la que tú hoy haces referencia,el pájaro que es bueno o de bandera lo es desde el primer día.

    Un fuerte abrazo José Antonio.

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  4. Amigo José Antonio soy pedro..los pajsros como la vida misma tenemos que hacerlos en la gran mayoría de los casos a base de muy buenas""culas""..pero te cuento hace ya bastantes años me dieron un pajsro de granja un amigo de alosno..lo metí en una caja de cartón y me fui a Huelva...llegue de noche a casa y el pajsro el la caja..lo saque y a la jaula a los pocos días ya estábamos en epica de caza le escucho unos reclamos embuchaos que me gustaron y lo saque ...y fijate me metió una hembra trabajando que me tenía atónito se la mató y al poco rato se repone y se va medio atolondrada en dirección a un zarzal y con los nervios salgo del puesto y la cojo ...todo ello sin tapar al pájaro ni nada y el pollo de espectador ...ya creyendo que la había rematado se la pongo al pollo de nuevo en el suelo...le toco un poco los palillos y me pica el los dedos me meto en el puesto con una irritación del doce por como se estaba portando el pollo y como yo...pues bueno al rsto veo que la perdiz no está donde la puse y el pollo que no había dejado de cantar se pone a recibir...miro por el lateral hacia donde miraba el pollo h veo a la perdiz que esta allí moviéndose con torpes movimientos "" ya yo me quería moris""... vuelvo a salir y ya la remate y se la vuelvo a poner al pollo en el suelo que había otra sido testigo de mi torpeza...pues siguió cantando y le mate otra pareja...y hasta que se murió fue bueno no lo siguiente....y le haría yo cosas mal hechas para que no cantaste más...pues para que veas..ese era un crack desde que estaba en el embrión...y así murió...por supuesto que por lo mucho y bien que cantaba y por de donde procedía le puse el nombre que mejor le venía....TORONJO...un saludo José antonio

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  5. Una reflexión interesante y claro no es una ciencia exacta.El que vale, vale, y el que no al cajón desastre de los mochuelos.Solo una observación,no necesariamente lo podemos saber en el primer puesto. Mi Feriante el primer puesto estuvo bien pero sin deslumbrar, al día de hoy sin que parezca pedantería lo considero el mejor pájaro del mundo.Todos diremos lo mismo de lo nuestro, pero de verdad me Feriante es el José Tomás. Saludos amigos que ya mismo estamos chascando los dedos después de colgar

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  6. Ante todo darles las gracia a los que participáis con vuestros comentario en el blog y a quienes me lo han hecho llegar a mi wasap.

    Sobre el tema decir, que esto no son dos más dos, que hay reclamos que rompen al segundo, tercero, cuarto, quinto…. puesto y al segundo, tercer… año y, tal circunstancia, la sé y no puedo decir que no, faltaría más.

    Ahora bien, en un altísimo porcentaje el reclamo del que hablamos y no paramos sale desde el primer día a levanta cobija, como se dice en algunas zonas de España, y da un auténtico recital esté como esté el día y esté como esté el campo y tal puntualización nadie me la va a negar porque lo he vivido en varios casos. Es más, este tipo de reclamos, aun con perrerías, normalmente, no suele estropearse aunque no sea de recibo.

    Ahora bien, también tengo muy claro que al pájaro de jaula hay que sacarlo al campo cuando tengamos la completa seguridad de que está en condiciones, si no es así, como dice un comentario, los campos pueden acoger a más de un buen reclamo por la falta de veteranía y conocimientos del cuquillero de turno.

    Saludos y muy pronto, nunca mejor dicho, estamos con la jaula a cuestas.

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