Como en temporadas anteriores, varios pollos -en este año seis-, engrosan mi jaulero con la ilusión de que alguno de ellos, tarea altamente difícil, llegue a convertirse en años venideros, en un "espada" de primer nivel.
Si tuviera que decir la verdad, tendría que precisar que, últimamente, no estoy teniendo suerte con el "ganao" nuevo. Por una causa o por otra, no me llega a cuajar ningún pollanco, por lo que, año tras año, mi gallera termina como empezó: con los de siempre.
Sin embargo, este otoño, han ido cayendo en mis manos varios noveles con una pinta envidiable, por lo menos sobre el papel: mansos, nobles, bonitos y, lo que es mejor, con buen cante, ya que si no lo tuvieran, no llegarían a la veda. Así, con estas componendas, hay algo que me dice que, entre ellos, casi seguro que alguno va a romper en figura. Es un barrunto, una ilusión, pero creo que será así.
Para empezar, dos pollos de Chimeneas (Granada) con una gran estampa. Si uno tiene buena pinta, el otro mejor. De todas formas, el primero me tiene más que engatuzado, ya que además de su belleza, le acompaña un buen cante. Luego el campo dictará sentencia; pero a priori, me gustan.
Este pollo de dos celos, sin colgar el año pasado, es regalo del buen amigo Poli Soto, de Válor (Granada). Gran reclamo y una suavidad que asombra. Está probado sin escopeta después de la cuelga y cumplió con creces.
A continuación, este pollo de dos celos, procedente del Rosal de la Frontera (Huelva), lo colgué sin escopeta finalizada la veda anterior. Metió una collera y estuvo enfrascado con el macho cerca de tres cuartos de hora. Tiene muy buen trabajo con la cacería cerca y, además, tiene un reclamo bronco y de bastantes golpes.
Este novel del año, un poco atrasaíllo, procede de la vecina Portugal. Canta bastante y no es bravo, aunque sí un poco arisco. Por ser de un lugar exento de jaula, esperemos que apunte bien, como suele ocurrir con los de dicha procedencia.
Para terminar, este pollo, regalo del amigo Luis Hernández Calero, me gusta bastante. Sobre todo, porque es muy manso y canta más que bien, incluso usa unos embuchados muy suaves y atractivos.
Los dos de dos celos, más otro pollo de segunda o tercera -Ramblas-, algarín y regalo de Felipe Albadalejo, pasarán por la peluquería el domingo próximo, 14 de noviembre, junto a los cinco que componen mi jaulero (Manchego, El Cojo, Guerrilla, Facul y Barbarino). Los otros cuatro del año, primeramente, veré lo que hacen en la mata, sin escopeta. Si apuntan maneras, tendrán una oportunidad al final del celo si el campo y ellos están buenos. Si son alambristas o saltarines, me los quito de encima rápidamente, ya que éstas, son características que no soporto, al igual que los cantes "picaos".
Jose Antonio: ¿ No son muchos pájaros? Claro que los pollos por lo que dices si no te gustan les das puerta pronto. Mucha suerte con los noveles.
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